Cómo afecta el coronavirus a la peluquería

La economía a nivel mundial se debilita a causa de una crisis inesperada: la voraz propagación del COVID-19. La enfermedad infecciosa consecuente del nuevo coronavirus no había sido detectada en humanos hasta diciembre de 2019 en Wuhan, China. Desde allí, el virus comenzó su expansión mundial; y después, lo que ya sabemos: la cuarentena. Dadas las circunstancias, los comercios están aplicando el ingenio para encontrar nuevas formar de atraer clientela. En esta nota, daremos luz a una industria en particular: la de la peluquería. ¿Cómo el coronavirus altera este nicho?

En China, por ejemplo, los y las peluqueros/as están cambiando drásticamente su look. Pero no es una cuestión estética. Aquí, un poco de contexto: los y las enfermeros/as y peluqueros/as son el personal sanitario que es parte de la primera línea de combate contra la pandemia. Las peluquerías, específicamente, funcionan como medida asistencial; atienden a personas mayores o con movilidad reducida que no puedan llevar a cabo ciertas medidas de higiene de manera independiente. Entonces, estos profesionales están optando por raparse la cabeza, indistintamente de su género. Evitan, de este modo, que el virus se transmita a través del contacto directo (de persona a persona) o indirecto (mediante objetos contaminados). La ausencia de pelo limita en gran medida las vías que el virus tiene para propagarse. Además, tener la cabeza despejada facilita el mecanismo de ponerse y sacarse el traje de protección y las máscaras.

Hasta que ejerció la cuarentena obligatoria, en las peluquerías chinas se vieron astutas iniciativas para seguir atendiendo. Cuando la medida de prevención era únicamente lavarse las manos y mantener una distancia de un metro y medio entre las personas, los chinos empezaron a usar varas y palos como extensiones para el mango de los cepillos, peines, secadores de pelo y afeitadoras. Los objetivos eran mantener la seguridad de los y las clientes/as y empleados/as, y aportar un poco de risas a una problemática de semejante magnitud.

Mirá el video que muestra como lo hacían > Video Peluquería China

Las peluquerías también debían “contactar a los clientes con reservaciones el día de su cita para preguntarles si tenían tos o fiebre, o algún otro síntoma que puede causar el virus”, según la información publicada en la Asociación de Estilistas y Belleza de Beijing. También habían acelerado el ritmo de trabajo y cancelado los turnos innecesarios, no sin antes desinfectarle las manos y las suelas de los zapatos a la clientela.

Mientras tanto, en España, el gobierno de Pedro Sánchez decretó el estado de alarma, impulsado por la crisis sanitaria, y a mediados de marzo exigió el cierre de todas las peluquerías; sin embargo, los y las peluqueros/as pueden trabajar a domicilio para garantizar la higiene de aquellos y aquellas que lo necesitan.

Esta decisión se adoptó después de que la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso haya insistido en cerrar las peluquerías, donde se trabaja “piel a piel”. El reclamo daba batalla al decreto que inicialmente contemplaba mantenerlas abiertas.

La situación de Italia es completamente distinta. Las peluquerías sí podrán mantenerse abiertas, con la justificación de que funcionan como medida asistencial.

No obstante, al cierre de esta nota, los y las peluqueros/as no se manifiestan conformes con esta medida y demandan el cierre de estos salones para evitar el contagio. “Resulta imposible mantener la distancia de seguridad de al menos un metro de distancia recomendada por el Ministerio de Sanidad”, explicó Antonio Jaumandreu, secretario jurídico del Consejo Nacional de Empresarios de Peluquería y Estética (Conepe).

En Argentina todavía estamos a tiempo de evitar el colapso del sistema sanitario: desde Vanta recomendamos lavarse las manos con frecuencia por al menos 20 segundos, tomar mucha agua y en la medida que se pueda, quedarse en su casa y cumplir la cuarentena. En estos días de aislamiento, te queremos cuidar y acompañar. Por eso, armamos unas cápsulas con consejos para épocas de cuarentena que publicaremos en Instagram. La primera ya está online y la podés ver haciendo click acá.