- mayo 18, 2022
Mitos sobre el cabello
Si uno recorre una farmacia, puede encontrar una maquinita de afeitar rosa y otra con la misma estructura pero azul. La rosa llevará la etiqueta “para mujeres”, mientras que la azul estará destinada a los hombres. Sucede que cuando esta situación se expresa en un producto para el cabello, no tiene mucho sentido: el pelo de los hombres no es diferente al de las mujeres. Los cuidados y sus necesidades son exactamente los mismos, por lo que la división de género en los productos es injustificable. He aquí el primer mito a derribar. En esta nota, desmentimos algunas de las tantas falsedades que suelen recorrer el boca en boca.
¿Cuántas veces escuchaste que si te arrancabas una cana salían dos? ¿O que si te cortabas el pelo con luna llena iba a crecer más rápido después? Estas creencias son mitos populares que no tienen ningún sustento científico. De hecho, probablemente, surgieron de supersticiones antiguas.
Las canas cargan consigo muchas mentiras. Se corrió el rumor de que el estrés provoca la aparición del pelo grisáceo, pero expertos de la universidad de Harvard aseguraron que si bien el estrés puede acelerar los procesos de despigmentación, no es una causa directa. Sí lo es la genética, por ejemplo.
Un mito muy común: cortarse las puntas fortalece el cabello. Pero, ¿cómo podría ser? El pelo crece desde los folículos en el cuero cabelludo, lo que pase en las puntas no modifica su fuerza. Sí puede pasar que el pelo luzca más saludable si las puntas crespadas se recortan, pero no influye en el ritmo de su crecimiento.
Por último, muchos recomiendan que frente a un pelo graso se aumente la frecuencia de lavado. ¡No rotundo! La última afirmación es completamente contraproducente. Este tipo de cabello no debe lavarse más de una vez al día. La razón es que frente al baño, el agua barre con el sebo, sustancia que produce el cuero cabelludo para proteger el cabello de los elementos externos y que contribuye a mantener la hidratación adecuada del pelo y el cuerpo producirá aún más. Para combatir el exceso de sebo: un buen producto específico para eso.
Ahora bien, la próxima vez que escuches estas creencias, desde Vanta te invitamos a demostrar que son falsas, con argumento y convicción. Adelante.